Hola, Tullian@s.
Primero de todo, desear que tod@s vosotr@s y vuestras familias os encontréis en perfecto estado y que esta pesadilla os afecte lo menos posible.
Nos ha tocado vivir una situación nueva, extraña y peligrosa. Una situación que ha roto nuestros hábitos cotidianos y nos ha llevado a un confinamiento al que nos estamos acostumbrando con la responsabilidad que requiere el momento.
Ante esta coyuntura, la Junta Directiva de Tullianos ha tenido que tomar una decisión importante y dolorosa. No ha sido tomada de manera irreflexiva, sino que ha sido muy ponderada y consensuada.
Como sabéis, nuestra XVIII Convención ya tenía fecha: el próximo 4 de julio. Finalmente hemos tenido que decidir suspenderla.
A día de hoy, no sabemos qué caminos tomará esta pandemia. No podemos saber cuándo se levantará este estado de excepción que estamos viviendo y cuándo volverá la normalidad. No sabemos si en el mes de julio ya estarán permitidas las reuniones multitudinarias y si los actos culturales se habrán reemprendido.
Además, en las fechas en que nos encontramos, deberíamos tener cerradas ya todas las actuaciones, los viajes, los vuelos y los hoteles. Ya habíamos hecho los contactos con todos los músicos de este año, pero una asociación pequeña como la nuestra no puede arriesgarse a invertir todo ese dinero existiendo la posibilidad de que después no se pueda realizar el evento. O que la gente, algo que sería normalísimo, tuviera reticencias a viajar y a asistir a nuestra fiesta.
Hemos debatido hasta el último momento sobre si suspender o aplazar para más adelante nuestra Convención. Al final, nos hemos puesto de acuerdo en que lo mejor es suspenderla. No sabemos cuánto va a durar esta situación y no podemos arriesgarnos en hacer planes a medio plazo. Cuando la cosa se normalice, decidiremos qué podemos hacer.
Así pues, Tullian@s, este año no habrá Convención. Después de 17 ediciones seguidas, este año no vamos a poder disfrutar de un día de hermandad tulliana y de buena música. No sabéis la pena que sentimos y lo que nos ha costado tomar esta decisión.
Se abre ahora un período de incertidumbre para nuestra asociación. Si la gente no paga la cuota anual porque no hay Convención, posiblemente sea el final de Tullianos y esto nos lleve a la desaparición. Si los socios abonan la cuota de manera normal, el año próximo volveremos más fuertes y podremos celebrar una Convención que valga por dos...
Nada más, Tullian@s. Sentimos mucho habernos visto obligados a redactar un comunicado de este tipo.
Deseamos de todo corazón que el dichoso coronavirus os afecte lo menos posible.
Estamos en contacto. Besos y abrazos.
La Junta Directiva de Tullianos
